La vida de los libros
Copio aquí la crónica del Diario del Altoaragón impreso el 14 /02/2010
"La vida de los libros" (Xordica, 2009) es el último título del escritor y bibliófilo zaragozano José Luis Melero, una obra que exhuma autores y publicaciones "raras", a través de la recopilación de 110 artículos, que habían sido publicados semanalmente en un suplemento cultural. Para el autor, su última creación es "un libro sobre libros raros y olvidados", que son, precisamente, los que más le interesan a él, mucho más que aquellos que se ajustan al canon, que aparecen en los manuales de literatura o que se comentan en los suplementos literarios. "Son libros diferentes, distinguidos y raros", insiste José Luis Melero. HUESCA.- El gusto por este tipo de literatura, piensa él, "es lo que distingue a los lectores de raza de los que se dejan llevar por los críticos literarios o las modas". Y, desde que decidió "robar" un tiempo a la lectura para dedicárselo a la escritura, se ha dedicado a recuperar a los autores olvidados, a los que no tuvieron suerte, a muchos de los que ya nadie se acuerda, los que ni siquiera aparecen en letra pequeña en una nota a pie de página. "Esos escritores de segunda fila -puntualiza- a lo mejor tienen libros verdaderamente extraordinarios, que quizá no fueron reeditados o tuvieron mala suerte". "La labor de los aficionados a los libros como yo es exhumar esos textos -prosigue-, recogerlos, mimarlos, editarlos y presentarlos, darlos a conocer como lo que son, libros muy importantes que no han tenido suerte". José Luis Melero no puede ocultar su debilidad por los "perdedores", hablando siempre desde el punto de vista literario, porque, como observa, "los ganadores siempre tienen quienes les defiendan". Por eso le gusta Mariano Sebastián, un escritor de coplas de jota absurdas "que firmaba como "Autor de lo peor que se ha publicado hasta el día" y José Ayala, que con 17 años fue condenado a dos años y medio de prisión por insultar a Alfonso XIII en un solo artículo. Por eso, se entusiasma al hablar de José Soler Casabón, que sólo editó 34 ejemplares de su único libro cuando salió del campo de concentración francés de Argelès-sur-Mer y casi se emociona al recordar cómo le temblaban las manos cuando adquirió uno de ellos. "La vida de los libros" también está lleno de guiños a Huesca, como se aprecia en los capítulos de "El raro de Fonz", "Chesos y ansotanos" o "Arzobispos", donde refiere que desde el siglo XVII sólo ha habido un arzobispo aragonés en Zaragoza, que fue Vicente Alda y que antes ejerció como obispo de Huesca. Además de ocuparse de los escritores olvidados, José Luis Melero también revela algunas anécdotas e historias poco conocidas de autores muy renombrados como García Lorca o Jaime Gil de Biedma. "De Juan Benet, cuento cómo fue un día banderillero en la plaza de toros de Calanda, donde toreaba Domingo Ortega. Fue la única vez que se vistió de luces. Esto es lo que puedo aportar yo -subrayó Melero-, un dato diferente, porque si hablo de Benet lo que no voy a hacer es referirme a su obra más importante, "Volverás a Región", sobre la que ya se han escrito trescientos libros y está perfectamente estudiada". "La vida de los libros" no es la primera obra de estas características que escribe José Luis Melero. En "Leer para contarlo", relataba todas sus aventuras y lo que había tenido que hacer para ir encontrando los libros por ciudades de España y de medio mundo. En "Los libros de la guerra", recuperaba también más de cien títulos sobre la Guerra Civil española en Aragón, todos ellos poco o nada conocidos para la mayor parte del público. Junto con José Luis Acín, publicó "Cuentos aragoneses" y "Más cuentos aragoneses". En suma, José Luis Melero manifiesta un especial interés por "la literatura española y los temas de guerra civil, la bohemia, los perdedores, los malditos, los libros de bibliografía y cualquier título que tenga relación con la literatura, la historia, la política y cualquier cosa de Aragón". PRESENTACIÓN EN ANONIMA José Luis Melero presentó "La vida de los libros" el pasado viernes en Huesca, acompañado por el profesor José Domingo Dueñas y el escritor Carlos Castán, en un acto que se celebró en la Librería Anónima y que presentó el titular del establecimiento, José María Aniés. José Luis Melero expresó su alegría por presentar el libro en Huesca, donde confesó que ninguna otra cosa le ha dado más satisfacciones que los libros. "Lo que más me gusta del mundo es leer, es lo que me hace feliz", afirmó y, modestamente, indicó que su pretensión al escribir es divulgar algunas de sus lecturas para que la gente se divierta. José Domingo Dueñas y Carlos Castán comentaron sus impresiones sobre "La vida de los libros". Antes, Dueñas se refirió a Melero como alguien mitómano, devoto desde antiguo por la letra impresa, contumaz bibliófilo y lector impenitente. Respecto al libro, el profesor destacó el valor de la anécdota y su capacidad para llegar más hondo al lector y para revelar mejor a los personajes, y consideró que "La vida de los libros" se instala en "la historia humana, humanizada, de la literatura". "Melero es apasionado, como persona y como escritor, es un entusiasta que provoca entusiasmo. Es un hombre entregado como pocos a vivir y que por ello también enseña a vivir, a disfrutar de las cosas: su familia, los amigos, el Real Zaragoza están en su santoral particular en lugar preferente. Y desde que yo lo conozco -manifestó Dueñas- ha ido construyendo su marco cultural y afectivo de referencia, que en buena parte es Aragón y lo aragonés, pero entendido no como cerco, sino como trampolín desde el que lanzarse lejos". Carlos Castán consideró que los artículos de Melero recopilados en un libro ganan "muchísimo" y permiten al lector adquirir una visión de conjunto. Se refirió a algunos de ellos como "tronchantes", en contraposición a otros que calificó de "sobrecogedores". "Se ve la variedad que encontramos en la vida -señaló Castán-. La literatura en sí misma es poca cosa, es algo en la media que nos habla del amor, la amistad, la alegría, las cosas cotidianas". Destacó que es un libro con el que se puede aprender algo más sustancial que una serie de datos: "Tiene que ver con la humanidad, con un equilibrio, con un sentido de la justicia que podría entenderse como una inmensa lección de ética". Después de bosquejar algunos de los capítulos con los que más había disfrutado, Carlos Castán destacó la capacidad de trabajo de José Luis Melero, quien, a pesar de sus múltiples dedicaciones, nunca ha sido "avaro" con su tiempo. "No he conocido a una persona tan bien educada y tan generosa", señaló Castán, y, refiriéndose a Melero, apuntó que, en contraste con algunas historias tristes que refiere en su libro, "a veces, algunas veces, la gente recoge lo que siembra"."Los escritores de segunda fila a lo mejor tienen libros extraordinarios"
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